15/12/10

¿Cómo conocer?

En una interesante conversación que he tenido esta tarde, ha surgido la idea de cómo conocer a las personas, cómo aproximarse a eso que consideramos características propias de cada uno, cómo considerar una característica como propia de alguien y, sobre todo, cuándo hacerlo, qué momentos son más propicios, más allá del tiempo que haga que conozcamos a esa persona, para decidir cómo es alguien.

Nos preguntábamos, con quien conversaba y yo, cómo entender e interpretar la información que proviene de alguien cuando ya te has inclinado a conocer a ese alguien, pero no la información que provenga de él con la intención de dártela como quien da un caramelo, no la que venga del otro para que la creas en un intento de transferencia, "yo es que soy un perfeccionista, y por lo tanto..." Aunque esto mismo podría decir más de lo que en la intención de quien lo dice pueda haber, es decir, podríamos atender a lo que emite quien lo dice, independientemente del contenido de este último lo.

La cuestión era indagar en bajo qué situaciones interpretar una información, sea cual fuere la forma en que nos llegue, como más verídica sobre la persona de que proviene, más ajustada a lo que en realidad es. ¿Bajo qué situaciones una persona es quien realmente es?

Las opciones que comentábamos, dentro de una visión idealizada de lo que pueden ser las situaciones en las que se encuentra una persona, aunque creo que no más de lo que pretendía Piaget, ahí es nada, con los conceptos de asimilación y acomodación, eran las siguientes:

  • Una situación conocida para la persona, donde habitualmente se desenvuelva bien, donde se sienta con una moderada capacidad de resolución y de actuación sobre el medio en el que está, donde nada le perturbe, más de lo que ya pueda estar. Donde pueda primar el proceso de asimilación, mediante el cual se mantiene y se da estabilidad a una estructura. Esta consolidación se debe a la habituación al input de estimulación sensorial, la cual permite a un organismo seleccionar aquella información más relevante para la satisfacción de las necesidades existentes
  • Una situación novedosa por completo para la otra persona, donde tenga que inventar nuevas formas de hacer, donde tenga que reescribir formas antiguas de desenvolverse, donde se sienta en cierto modo incómodo. Donde, en definitiva, pueda primar el proceso de acomodación.


Antes, no recuerdo ni desde cuándo, ni hasta cuándo, tenía más o menos decidido que era la segunda opción la ideal para conocer realmente a alguien. Ahora ya no. Como ejemplo, puedo decir que este mismo cambio en mi forma de pensar ya puede decir algo de quien lo escribe. Así, me viene a la mente la idea de la preeminencia de los factores contextuales en el desarrollo personal, y el regustillo que me deja volver a escribir un post con final divergente, o así lo contemplo yo, en medio de tanta convergencia.

17 comentarios :

x dijo...

Pues a ver qué te parece mi visión...yo lo veo así, esto de conocer a los demás:

http://www.youtube.com/watch?v=4QMClIAQebA&feature=player_embedded

http://www.youtube.com/watch?v=2sMl5_egn3o

David Herrero dijo...

Hola Carmenchu,

estoy tratando de integrar la información de tus vídeos y conformar con ella una posible visión de esto de conocer a los demás. Y me cuesta. De momento no te puedo decir más que ahí me hallo.

El primer vídeo es genial, y sobre el segundo, tengo que reconocer que antes escuchaba Pereza más que ahora.

Gracias por comentar, compañera de jornadas!

Un saludo.

Carmen dijo...

¡¡¡ Hola David ¡¡¡

Tenía ganas de saludarte, así que voy a aprovechar tu post con tu permiso y mi devoción :D)

¡Ah! ¿Existen situaciones ideales para conocer realmente a alguien? Ese alguien que asimila afianzando su propia estructura y que puede desestabilizarse si no consigue acomodo en una situación que desconoce, ¿no es la suma de los dos procesos, asimilación y acomodación? (suponiendo que la acomodación se produzca)¿Se conoce "realmente" a alguien observándolo en uno solo de los procesos?

Somos complejos y eso incluye, como en los números, una parte real y otra imaginaria, una racional y otra irracional, partes en las que nos mostramos enteros y partes en las que nos fraccionamos, crecimiento personal positivo, estancamiento y crecimiento negativo; pura matemática, jeje. No sé si prescindiendo de la suma soy capaz de decir, ni siquiera remotamente, que conozco a alguien (lo de "realmente" me hace sonreir con estupor: no sé lo que es real; de verdad, no lo sé). Creo que en las situaciones propias de descoloque e incomodidad es donde he aprendido + cómo soy yo misma; pero si sólo me quedara con esas... me tendría a veces por un auténtico desastre ¡Y no es para tanto, hombre!

Apuesto por los finales divergentes. Como me pasa en las pelis, el saborcillo agridulce me gusta y, en ocasiones, hasta me fascina.

Encantada de disfrutar contigo en tu espacio compartido.

Un abrazo,
Carmen

Unknown dijo...

Hola David

No me inclino ni de un lado ni del otro. Entiendo que para intentar conocer a una persona es necesario ubicarnos en ambas situaciones.

Aunque debemos estar consciente de que nunca terminamos de conocer a alguien en particular. Creo que el ser humano es una caja de sorpresas.

Juanjo dijo...

Hola a todos!!

Interesante post.

Sobretodo la relación entre mente y realidad y la forma de crear conocimiento.

Creo que es fundamental tomarse tiempo para notar, para aprender, ya sea de las personas o de cualquier otra cosa y ser conscientes de la gran parte de detalles que se pierden en el momento en el que que me alejo de la experiencia. Dichosa abstracción!!!

Es curioso cómo funciona el verbo "ser"

Carmen, cómo me gusta tu visión matemática.

Un abrazo

David Herrero dijo...

¡Carmen! Un gusto encontrarte por aquí :)

Me gusta tu primera pregunta, y me lleva a pensar en las diferentes formas que puede haber de evaluar el desempeño de una persona en una asignatura. ¿Cuál de las que conocemos permite conocer mejor lo que el otro conoce sobre lo que el docente quiere que conozca? ¿Cuál de ellas es la que más permite conocer sobre la propia persona?

Me encanta observar, pero, en muchos casos, el placer no sólo lo encuentro ahí, sino en el análisis de lo que me entra por la vista y de su interpretación en mi cabeza. Quiero decir con esto, que quizás ver a una persona desenvolverse en una situación que para ella es "peliaguda" reporte más información que verla en su cotidianidad... pero sólo a veces "situación peliaguda" significa lo mismo para distintas personas.

Lusverlyn bienvenida!! qué ilusión me hace verte aquí! Respecto a lo que dices, creo que nuestra capacidad de conocer a los demás depende de lo que nosotros mismos nos conozcamos, ¿no te parece? Yo cada día, o cada mes, o cada año, me siento distinto con respecto al anterior, así pues... puedo ir olvidándome, me parece, de "terminar" de conocer a alguien, ja!!

Por cierto, aprovecho para presentarte a Juanjo, que el otro da se me fue...

...y a ti, Juanjo, ídem :)
Me haces pensar en eso de que el mundo creó el lenguaje, pero que es a través del lenguaje como creamos el mundo. ¿Aterrizaste ya de tu vuelta del curso alicantino?

Un abrazo a todos, y gracias por comentar.

Juanjo dijo...

Hola Lusverlyn!!!

es un placer. Es cierto que el otro día salimos escopetaos del cine.

¡por cierto, qué cabreo me pillé con la dichosa película!! y lo que más me asombra es por qué me engancha. Quizás es por la forma de tratar la realidad como si fuera algo objetivable, a la que uno puede tener acceso de forma independiente y salirse de ella cuando quiera sin tener en cuenta que lo que uno percibe depende de la posición desde la que se experimenta. Es como si uno mira a través de un cristal, verá parte de lo que hay fuera y parte de su reflejo en el mismo,.... no sé, establece relaciones como si fueran las "relaciones", en fin,...

Bueno, os dejo con la "situación peliaguda"

Un abrazo.

David Herrero dijo...

No te cabrees, hombre, si cuesta un euro la entrada y, además, el edificio es precioso y está bien acondicionado :)

A mí también me cabreó, pero fue su contenido, no su forma, que está muy en la línea de su autor, Michael Moore. La gente lo acusa de convertir lo que muestra y cuenta en un producto demagógico... y no sé qué pensar al respecto. ?Es más demagógica "Las Uvas de la Ira", una de las obras maestras de John Ford, de la que, me da la sensación, bebe este documental? No sé si la habréis visto, pero muestra lo mismo que "Capitalism, a love story", pero mintiendo más y mejor. Por eso es incontestable, mientras que la obra de Moore no.

David Herrero dijo...

Para el osado explorador que llegue hasta aquí, añado lo siguiente sobre el post principal:

¿Qué hay sobre la forma en que queramos que nos conozcan?, ¿en qué situaciones nos gustaría que esa persona que atiende observando, escuchando y analizando, sacara sus conclusiones?

Propongo leer las siguientes sugerencias y atender a qué evocan dentro de la propia experiencia. Poner en cada pregunta una situación real y pensar si queremos ser identificados por nuestro desempeño en ella.

¿Un día normal?, ¿una semana normal?, ¿un viaje normal?, ¿una salida nocturna normal?, ¿un trabajo en grupo normal?, ¿una cita dentro de un día normal?

¿Un día especial?, ¿una semana especial?, ¿un viaje especial?, ¿una salida nocturna especial?, ¿un trabajo en grupo especial?, ¿una cita dentro de un día especial?

¿Y qué habría sobre las combinaciones entre cómo queremos conocer, y cómo queremos que nos conozcan? Imaginemos un caso donde se prefiera leer a los demás a través de situaciones que provoquen procesos de acomodación y que, por el contrario, se quiera ser leído en las propias situaciones cotidianas donde se opere con procesos de asimilación. Imaginemos un caso a la viceversa.

No tengo ni idea sobre esto que escribo, pero recuerdo un modelo sobre el que trabajamos, literalmente, en el curso del verano de 2010 de Alejandro Iborra. Constaba de cuatro componentes (supongo que sería el modelo utilitario) que recuerdo como: "aburrimiento" "riesgo" "crecimiento" y "miedo". Me encantó. Y lo rescato porque, con todo esto, anexos incluido, creo que lo que quiero decir es que busco, ansío, anhelo la normalidad.

Feliz Navidad, y a quien use Spotify, le recomiendo que la acompañe con este discazo de hace más de 40 años: http://open.spotify.com/album/4usxfUImNER8bHZANHcd0J (A Christmas Gift for You from Phil Spector)

Juanjo dijo...

Hola David!

Muy interesantes las preguntas que nos propones. Supongo que eso tiene que tener una función, me refiero el atender a que nos gustaría que nos conocieran de alguna manera, es decir, que puede tratarse de una forma de gestionar algo. De la misma manera que para Tracy cambiar su vestuario entiendo que era una forma de gestionar su pertenencia a un grupo social determinado uno puede manejar su conducta para simular afecto, cariño,.., en fin, infinidad de cosas para que sean expresivas de valores en relación con algo. Y no es lo mismo que a uno le guste o quiera que le conozcan así a que uno lo necesite o lo desee ¿no?

Como dices, ansías la normalidad, ¡qué difícil!, ¿qué es eso?, ¡uff!, me gustaron algunos autores de la Escuela de Palo Alto y de la de Filadelfia, supongo que en el Master los estaréis viendo, sino es así, es una buena fuente para comprender mejor esto de la comunicación interpersonal y de cómo presentarse en sociedad, por utilizar el término de uno de sus autores..

Sobre lo de asimilar y acomodar, tengo ahí unos enormes huecos y vienen de cuando Alejandro en una de sus clase nos pidió que pusiéramos un ejemplo de cada uno para ver si los habíamos comprendido.
Por eso, me gusta cuando estás conociendo a alguien y se te resiste al conocimiento, el no saber o comprender por qué hace lo que hace. Para comprenderlo habría que investigar más, hacer más para adquirir conocimiento, supongo que es ahí donde entran en juego las etiquetas de asimilar o acomodar, aunque en otros sitios he oído hablar de ellas como asimilar e integrar. Por que entiendo, por poner un ejemplo que cuando te tomas el café de por la mañana no lo acomodas en ninguna parte de tu organismo, sino que lo vas integrando. Me parece que es un tanto metafórica, a mi gusto, la distinción.

Para mí, esto es un Handicap, porque uno tiene sus refugios intelectuales y emocionales, vamos su mundo aparte cuando interactúa con la gente, pero es enormemente gratificante cuando consigues estar EN la comunicación y con todas esa sensaciones que te provoca la proximidad, el contacto, la mirada, el escuchar sus palabras, su risa, los gestos de su cara, hacia dónde dirige su mirada,... son muchas cosas lo que los sentidos recogen y luego a partir de ahí se producen pensamientos, sentimientos, ideas, lenguaje interno,... Alejandro ha hablado mucho sobre estos distintos tipos de información en sus post.

Y digo que para mi es un Handicap porque DESDE donde atiendo es muy complicado, aún no lo entiendo y más cuando desde lo subjetivo hay también estructuras contextuales y objetivas de pensar,... no sé, esto me lo estoy figurando, habrá que investigar.
El caso que esto de tener un mundo aparte, aunque es una forma de seguridad insegura, te proporciona un insensibilidad muy interesante, ¡desde luego que sí!, (irónicamente). Si para construir seguridad es necesario desensibilizarse, pues entonces habrá que buscar otras formas, opciones o posibilidades, en mi caso.

Creo que el modelo que comentas al final es el FADS (Miedo, Estancamiento, Desarrollo y Seguridad) creo que es para trabajar con las emociones que hay en una transición y me parece muy pertinente que lo menciones sobretodo porque todos estos sentimientos son temporales y no para permanecer durante mucho tiempo.

Un abrazo.

David Herrero dijo...

Hola Juanjo.

Gracias por contestar. Mira lo que dice Mark Engel en el prólogo del libro de Bateson Pasos para una ecología de la mente: "Pero algunas veces la disonancia entre la realidad y las falsas creencias llega hasta un punto en que resulta imposible evitar la conciencia de que el mundo ha dejado de tener sentido. Sólo entonces le es posible a la mente considerar ideas y percepciones radicalmente diferentes". No es un ejemplo, pero ¿qué te parece para el tema de la acomodación?

Continua diciendo "No hay garantía de que las nuevas ideas hayan de ser un mejoramiento respecto de las viejas. Tampoco podemos esperanzarnos de que el cambio sea suave."

Como prólogo que es, lo que hace es presentar el libro, y mediante estas palabras el cambio en la forma de pensar que requieren los "muertos culturalmente" de su generación, pero quizás también sirva para entender esas distinciones de Piaget ;)

Un abrazo.

Juanjo dijo...

Hola David.

Gracias a ti también por mantener esto con nuevas preguntas e inquietudes, me ayudas bastante a reflexionar, y a pensar sobre cosas ya dadas, que no cerradas, te lo agradezco.

Muy interesante lo de Mark Engel, habrá que leer el libro. Es alentador que en el prólogo ya se susciten cuestiones tan “desestabilizadoras”, por tanto, el resto del mismo tiene que ser un terremoto, ya nos contarás. Bateson parece un tío bastante interesante por lo que hemos visto en clase, entre otras cosas, por su forma de generar contextos desde los cuales reflexionar.

A la par que interesante, me parece enormemente complejo lo que suscita M. Engel en lo referente a “la disonancia entre realidad y falsas creencias”, ¿cómo se articulan “realidad”, “creencias” y “disonancia”? ¿mediante qué procesos?, ¿cómo algo es significativo o deja de serlo?¿cómo funciona eso?

No sé, ya te digo que es un tema que me suscita muchas dudas, fundamentalmente la relación entre mente y realidad en la formación de conocimiento, que me da la sensación que es el tema que tratamos de fondo.

Como bien dices, si no tienes las distinciones no puedes establecer diferencias ¿no?, ¿tú que piensas?

Un abrazo, ¡Feliz año nuevo! y seguimos en contacto.

David Herrero dijo...

De nada, majo. Esto de mantener el blog es un placer y, a veces, hasta un vicio.

Rescaté Pasos para una ecología de la mente por que, como mencionaste a los autores de Palo Alto, y si no me equivoco, creo que Bateson es uno de ellos, pues pensé que lo habías leído.

¿Me preguntabas si alguno de estos autores aparecían por nuestro máster? ja!... no, mejor, JA!

Como me dijo cierto profesor que hemos compartido y al que últimamente se le ve algo subidito, no sé si es que ha ascendido de categoría o qué ;) más vale en algunos contextos disponerte bien a diferenciar la motivación de afilicación de la de logro. Y en ello estamos, amigo Juanjo.

Feliz final de año!

P.S.: perdona por hacer caso omiso a tu pregunta, pero es que es muy difícil :)

Juanjo dijo...

Hola David!!

Feliz año para ti también. Disfruta de la noche y de los tuyos

Un abrazo

Gloria Nogueiras Redondo dijo...

¿Cómo conocer...? en fin... a estas horas, y en este estado, sólo puedo decir que la "bendita ignorancia" no ayudará mucho :)

Gracias.

Gloria Nogueiras Redondo dijo...

Por cierto, se dice "subtle"... :) Me acabo de topar con ello al comenzar repasar el artículo de S. Livingstone, coincidencias!

David Herrero dijo...

Welcome back, young and bold girl :)